Pues la vida no tiene otro sentido que el que el hombre le da
Hay gente a la que le gusta ser atada, personas que gozan golpeando o siendo azotadas, gente a la que le agrada vivir su sexualidad de una forma diferente a la que es entendida (o malentendida) como normal… Esa gente encuentra un lugar de reunión perfecto en el Club Rosas 5.
